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A medida que la investigación sobre los exportadores de carne avanzó, y la sobrefacturación se confirmó, la Aduana se vio obligada a recorrer dos caminos paralelos: la denuncia judicial y la investigación. La primera ya existe, y fue anticipada en una nota de Minuto de Cierre de la semana pasada: https://minutodecierre.com/nota/2023-2-6-14-4-0-economia-investiga-a-los-frigorificos-por-subfacturacion-y-triangulacion-de-exportaciones, Aunque por ahora se reserva el dato sobre quiénes son los funcionarios judiciales que llevan adelante la causa, ya se publicó que una de las operaciones favoritas de los supuestos evasores es el llamado "rulo de la vaca vieja".

Tal como se anticipó en una nota de Infobae el último sábado (https://www.infobae.com/economia/2023/02/11/rulo-de-la-vaca-vieja-la-aduana-detecto-523-operaciones-por-las-que-22-frigorificos-subfacturaron-casi-usd-12-millones-en-exportaciones-de-carne/), el principal destino de exportación es China, se declaran como vaca vieja toneladas de vacunos de otra categoría, y ya se relevaron 22 frigoríficos que subfacturaron casi 12 millones de dólares. Entre ellos está el frigorífico chino Black Bamboo, del cual hace un año y medio -en agosto del 2021- se descubrió que exportaba asado, uno de los siete cortes prohibidos de vender al exterior, rotulándolo como "punta de hueso lumbar". La curiosidad es que, en esa situación, la Aduana -entonces manejada por Silvia Traverso, y la AFIP por Mercedes Marcó del Pont- se enteró por una nota de este medio (https://www.minutodecierre.com/nota/2021-8-25-9-31-0-el-frigorifico-chino-black-bamboo-sospechoso-de-exportar-cortes-de-carne-prohibidos-en-el-deposito-fiscal-bajo-cero), y que recién después de la revelación periodístico envío una inspección al frigorífico ubicado en Santa Fe. 

En la combinación de un sector tradicionalmente sospechado de evasión fiscal, y la necesidad electoral de mantener los precios relativamente tranquilos, la Aduana decidió avanzar a fondo. En las últimas semanas, confirmando operaciones, montos y nombres que revelan sistematicidad antes que excepciones, el organismo conducido por Guillermo Michel decidió no sólo auxiliarse en la Justicia, como además corresponde, sino además investigar internamente a los funcionarios que ocupaban lugares clave y permitían -toleraban, alentaban, participaban, el verbo que se quiera ponerle- estas maniobras.

 

"Tribilín" y el "dueño de Campana"

 

Aunque no era la idea original de Guillermo Michel profundizar la investigación interna, terminó convenciéndose que ello es imprescindible. En principio apuntando a los funcionarios que ocupaban jefaturas clave, pero ya está también la lista de aquellos con menos exposición e igual poder. Según averiguó Minuto de Cierre en exclusiva, las áreas y personas bajo la lupa son principalmente dos: Fernando "Tribilín" González, ex jefe del ramo de la carne y Walter Miguel Guillerme, que era jefe operativo de la Aduana de Campana. "Guillermo está muy enojado, no sólo por lo que hicieron con la carne, sino también por sus antecedentes e historial", confirmó un funcionario de extrema confianza del mandamás de la Aduana. Por ello los tres fiueron desplazados de sus cargos hace ya un buen tiempo.

De estos tres, el de perfil más alto, especialmente por su verborragia que no distingue mejores o peores momentos en su carrera, es "Tribilín" González. Propietario de unas 4.000 cabezas de ganado, él dice que las consiguió trabajando y ahorrando, lo cual no quita que haya estado de los dos lados del mostrador: productor y controlador aduanero del mismo rubro. Desde fines de noviembre, como anticipó este medio (https://www.minutodecierre.com/nota/2022-12-2-11-33-0-la-aduana-comenzo-a-descabezar-jefes-de-ramo-primero-la-carne-siguen-alimentos-y-electronicos), la Aduana decidió cambiar a los jefes de ramo más importantes.

En tanto que Walter Miguel Guillerme manejaba la Aduana de Campana, un lugar clave al final de la Hidrovía, de tal forma que lo llamaban "el dueño". Gran parte de las investigaciones del organismo, algunas con su capítulo judicial, tiene como base de operaciones a Campana: exportaciones de cereales, oleaginosas, granos, carne; importación de textiles, automóviles, maquinaria y bienes de capital. El manejo de todo estaba a cargo de Guillerme, rodeado de un equipo que le respondía. Sin contar que para ello el ex jefe de Campana "limpió" a funcionarios de carrera que hoy tienen llegada directa, y muchas ganas de contarle historias verdaderas, al director de la Aduana.