21 de Enero de 2020 - 10:03

Gladys Morando, la “coronel” de la AFIP que es anti K, ascendió durante el macrismo y fue confirmada en su cargo

La segunda funcionaria en importancia de la Aduana muestra en redes sociales un perfil de troll macrista. Burlas hacia el presidente Alberto Fernández, Cristina y Máximo Kirchner, sumado a un apoyo irrestricto a Macri. Los dos grandes errores que le adjudican: exención de impuestos para la importación de subterráneos, y la intoxicación del personal en un instituto técnico de examen de mercaderías.

En esta época de redes sociales, la ideología de cada usuario no sólo se explica por los “posteos” propios, sino también por aquellos que replica. En este sentido, el perfil de pensamiento de Gladys Morando es muy claro: “Perón, un militar admirador de Mussolini y de Hitler ….”; “Yo y toda mi familia somos de clase trabajadora. Jajajaja” (con el rostro de Máximo Kirchner); “Los Kirchner y sus amigos se quedaron con un PBI y se compraron medio país”; “Me gustó el spot de campaña de los Fernández nombrando ciudades y pueblos. Solo les faltó El Bolsón y La Plata”. Entre otros.  

En la actualidad, Gladys Liliana Morando es la subdirectora general (en la AFIP le dicen “coroneles” a los que ostentan esa categoría) de Técnico Legal Aduanero. Silvia Brunilda Traverso, la directora de Aduana, tiene debajo de ella cuatro subdireciones: Morando ocupa una, Javier Zabaljáuregui otra (Operaciones Aduaneras Metropolitanas), mientras que siguen vacantes (por lo menos así figura en la página oficial de la AFIP) Interior y Control. Dentro de la Aduana, nadie duda: Morando y Zabaljáuregui fueron confirmados en sus cargos por Traverso. La titular de Aduana tiene depositada en ella la confianza de Mercedes Marcó del Pont, titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), pero nunca trabajó en el organismo.

Morando llegó a la estratégica subdirección de la mano de Juan José Gómez Centurión, el primer director de Aduana del gobierno de Mauricio Macri. Durante los 4 años del gobierno de Cambiemos, entró y salió de ese cargo. Lo desempeñó hasta noviembre del 2016, cuando mediante la Disposición 409/2016 la relevaron de la subdirección. Pero no fue un castigo sino un premio: se transformó en la asesora dilecta del director del organismo, Gómez Centurión primero y Diego Dávila después. Su despacho estaban en el primer piso del histórico edificio de Azopardo y Belgrano, a metros de donde estaba su jefe ocasional. 

En marzo del 2019 volvió a la subdirección Técnico Legal, desplazando a Mario Giachello. Todo ello, ya con Dávila como jefe de la Aduana, se decidió mediante la Disposición Interna 71-9, que consolidó distintos cambios dentro del organismo: http://www.afip.gob.ar/sitio/externos/institucional/autoridades/documentos/DI-2019-71-E-AFIP.pdf

Subte sin impuestos, y un laboratorio que produjo intoxicados

De Morando, diversas fuentes -algunas que la estiman, otras que no- destacan que tiene experiencia y solvencia técnica, pero que la lealtad política mal entendida la llevó a cometer errores. “Tengo buen concepto, es una funcionario capaz; pero no entiendo por qué usa las redes sociales como tribuna partidaria”, dictamina un viejo conocedor de los cuadros y las internas de la Aduana. “Es buena en lo técnico, se formó en su área, pero es muy fanática del PRO”, asevera otro de los consultados. 

La primacía de su lado político sobre el técnico la llevó, por ejemplo, a permitir que se exima a Subterráneos de Buenos Aires Sociedad del Estado (SBASE) de u$s 47 millones en impuestos por la importación de vagones para el subterráneo. Un tema que destapó Minuto de Cierre (https://www.minutodecierre.com/nota/2019-12-12-20-17-0-gomez-centurion-eximio-al-subte-de-u-s-47-millones-por-derechos-de-importacion-por-pedido-y-presion-de-un-despachante-vinculado-al-pro), y que encontró a todos los fiscales y jueces distraídos como para abrir una investigación de oficio.

Como se detalló en esa nota, y es de conocimiento casi vulgar, sólo el Congreso puede decidir si un impuesto se cobra o no. Gómez Centurión, con la falta de saber técnico y la personalidad impulsiva que lo caracteriza, decidió eximir a SBASE de u$s 47 millones en impuestos, por pedido del despachante de Aduana Hernán Marotta, que además fue concejal de Cambiemos en San Isidro. Justo el distrito en el cual vive Gómez Centurión. Con su experiencia y conocimiento técnico de la Aduana, Morando podría haber frenado esta decisión, pero no lo hizo. “Tiene la costumbre de obedecer a sus jefes, aunque sepa que están equivocados”, aseguró un aduanero de carrera.

Por otra parte, del área de Morando depende el Instituto Técnico de Examen de Mercaderías (ITEM), donde 20 empleados resultaron intoxicados con metales pesados, por negligencia y falta de presupuesto. Ello mereció inclusive la apertura de un sumario administrativo en el organismo, que sigue vigente. El tema también fue relatado por este medio, en noviembre del año pasado (https://www.minutodecierre.com/nota/2019-11-6-13-27-0-investigacion-interna-de-la-afip-20-aduaneros-intoxicados-con-metales-pesados-por-negligencia-y-falta-de-presupuesto), y contó con la misma suerte del tema anterior: toda la Justicia distraída. 

“Una Aduana antiperonista”

Apenas asumió como directora de la Aduana, a Silvia Brunilda Traverso le sacaron a relucir fotos recientes donde expresaba su gran amistad con Jorge Faurie, el último canciller de Macri. Un tema que no merece atención, pues nadie resulta culpable de nada por tener amigos. De las tres direcciones de la AFIP, a Marcó del Pont solo la dejaron decidir una. Justamente la Aduana, mientras que los números 1 de DGI -Virginia García- y Seguridad Social -Carlos Castagnetto- llegaron directamente por orden de Cristina Kirchner.

Sin embargo, lo que en un momento pareció entendible por la decisión de la titular de la AFIP de sostener a una persona de su confianza, ahora empieza a virar en lo que parece “una Aduana anti peronista”, según diversas fuentes. “Javier Zabaljáuregui (subdirector de Operaciones Aduaneras Metropolitanas) es muy parecido a Morando: gorila profundo y creció en la presidencia de Macri”, apunta un ex alto cargo de la Aduana. Zabaljáuregui fue el responsable, entre otras cuestiones, de haber tapado una subfacturación (caños para obra declarados como domiciliarios) de Odebrecht, por pedido de Marcos Peña y Alberto Abad. Algo que bien podría acreditar una denuncia penal, y que fue descripto con todo detalle en la siguiente nota: https://www.minutodecierre.com/nota/2019-11-7-10-7-0-marcos-pena-y-alberto-abad-taparon-una-subfacturacion-de-odebrecht-evitandole-una-multa-millonaria-y-la-causa-penal-que-hubieran-correspondido

Desde que Mercedes Marcó del Pont se hizo cargo de la AFIP, y Traverso de la Aduana, muchas de las personas claves de la era Gómez Centurión-Dávila resultaron premiadas o cobijadas. Este medio contó que a cuatro asesores le prorrogaron el contrato con sueldos que van desde casi $ 155.000 hasta $ 355.000. Ese es el es caso de Felipe Viramonte Noguer, Ignacio Gastón Federici (hermano del titular de la Unidad de Información Financiera y amigo personal de Diego Dávila), María Eugenia Talerico y Agustín Laurnagaray. La decisión fue tomada por Facundo Rocha, que era subdirector de Recursos Humanos cuando Dávila conducía el organismo. No por Marcó del Pont ni Traverso. Pero, hasta ahora, no se sabe que hayan desarmado esa decisión. 

Ya durante la gestión Marcó del Pont-Traverso, Morando presentó una lista para que varios de sus alfiles sean ubicados en buenos cargos. Entre ellos Giachello, a quien reemplazó en la subdirección Técnico Legal. Pero la lista es más extensa. En ella están Jorge Augusto Depetris (de la subdirección general de Fiscalización), Pablo Nicolás D´Errico (de Regional Aduanera Central), Diego Raúl Pérez Escobar (de Investigaciones) y Leopoldo Gustavo Curatolo (verificador). “Son todos PRO que respondían a Gómez Centurión”, les apuntan desde distintos lados.

El armado de una Aduana que parece del PRO tiene sorprendidos a casi todo el personal del organismo. Los más optimistas dicen que “será así hasta que tanto Marcó del Pont como Traverso se acomoden y tengan más claro el panorama, para marzo o abril”. Los más pesimistas dicen que el enfrentamiento entre Echegaray y Marcó del Pont lleva a esta última a cometer errores. “Se equivocan Ricardo y Mercedes en jugar al daño del otro, va a resultar beneficiado un tercero y no ellos” analiza un operador clave, que conoce a ambos y no quiere intervenir en esa pelea. “El problema es que mientas tanto hay que recaudar, y siguen destruyendo a la Aduana”, concluye amargado.  

 

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