06 de Noviembre de 2019 - 13:49

Sumario interno de la AFIP: 20 aduaneros intoxicados con metales pesados, por negligencia y falta de presupuesto

El tema debería estar en la Justicia, pero el administrador federal Leandro Cuccioli hace fuerza -“tapa”, dicen algunos- para que no sea más que una investigación interna del organismo. Por falta de presupuesto, y prácticas no profesionales, 20 aduaneros se intoxicaron en el Instituto Técnico de Examen de Mercaderías (ITEM). Cuccioli y Diego Dávila podrían enfrentarse a responsabilidades penales.

Lo que nunca había pasado, esta vez ocurrió. En el subsuelo del Instituto Técnico de Examen de Mercaderías (ITEM) de la Aduana, ubicado en Beauchef 1452 (Boedo, Capital Federal), la acumulación e inadecuada manipulación de metales pesados produjo la intoxicación de 20 empleados. “Entre los materiales había benceno y cobre, y tras lo ocurrido clausuraron el subsuelo, aunque no pusieron una faja ni nada por el estilo, pues quieren tapar el tema”, le contó a Minuto de Cierre una de las pocas fuentes que conoce bien el tema.

El ITEM es una estructura clave de la Aduana. Allí se corrobora, por ejemplo, si una carga secuestrada como droga ilegal efectivamente contiene la misma; o se analizan importaciones potencialmente peligrosas para la salud; como también pueden corroborarse procesos de subfacturación y evasión impositiva, como declarar alimento balanceado para animales lo que es soja y así evitar el pago de retenciones. Con la importancia que reviste el ITEM, los aduaneros se quejan que las últimas administraciones (Alberto Abad y Leandro Cuccioli en la AFIP, Gómez Centurión y Diego Dávila en Aduana) no le prestaron la importancia adecuada.

En primer lugar, con una baja de presupuesto notable que produjo, entre otras cosas, un mal manejo de los residuos patógenos. “Deben tener un tratamiento especial, con empresas especializadas en su retiro y tratamiento. Sin embargo, primero los acumularon y luego se los llevaron como si fueran basura común”, apuntó un conocedor del tema a este portal. Por otra parte, el ITEM funcionó como una especie de “depósito de funcionarios” que no gozaban de la simpatía de Abad, Cuccioli, Gómez Centurión o Dávila. “Mandaba allí a los congelados, cuando en el depósito del ITEM sólo debería haber bioquímicos y personal especializado”, agregó la misma fuente.

Problemas desde 2018, y la estrategia para evitar una denuncia penal

En el primer semestre del 2018, las autoridades aduaneras de carrera encargaron una inspección de ambiente en el edificio de Beauchef al 144, que arrojó resultados preocupantes. Las autoridades de la AFIP y la Aduana lo ocultaron, hasta que en agosto de ese año una empleada pidió los resultados y de ahí en más se hicieron análisis de los empleados. La conclusión de los mismos fue preocupante: estaban contaminados con distintas sustancias, algunas de ellas potencialmente cancerígenas.

A pesar de ello, se siguió trabajando. Hasta que en los últimos días alrededor de 20 empleados sufrieron una intoxicación severa y tuvieron que tomarse licencia médica. Recién ahí se clausuró el subsuelo. Un proceso que comenzó cuando Gómez Centurión era titular de la Aduana, y con la excusa de ahorrar dio de baja a la empresa que prestaba un servicio de limpieza especializada. Luego de ello, los residuos tóxicos empezaron a acumularse en el edificio de Boedo, sobre todo en el subsuelo.

Los eventos del 2018, y el agravamiento de los últimos días, ubican la responsabilidad penal sobre los titulares de AFIP y Aduana, Leandro Cuccioli y Diego Dávila respectivamente. Aunque también podría llegar hasta Gladys Morando, titular de la Subdirección General de Técnico Legal Aduanera, de la cual depende el ITEM. La investigación interna es justamente una excusa para evitar la denuncia penal. Aunque cualquier fiscal podría tomar el caso de oficio y comenzar una causa judicial. 
 

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