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La ola de crímenes a sangre fría a manos de sicarios narco que asesinan inocentes paraliza a la ciudad de Rosario, Santa Fe. Medios de transporte se encuentran suspendidos, no hay atención nocturna en las estaciones de servicio y no hay clases en las escuelas.

Ante la gravedad de la situación, ya harta conocida por los rosarinos pero que se vio intensificada a partir de la gestión del gobernador Maximiliano Pullaro, el Gobierno nacional decidió la intervención en Rosario, mediante el envío de todas las fuerzas de seguridad federales que tienen "el apoyo irrestricto" del Ejecutivo para "hacer lo que sea necesario para restaurar el orden". 

Los crímenes narco que paralizan Rosario

Dos colectiveros, un taxista y un playero son las víctimas del narcoterrorismo que se desplegó la última semana en la ciudad santafesina. El cao más reciente es el del joven Bruno, ejecutado a tiros en una estación de servicio. Por este crimen, que quedó registrado en las cámaras de seguridad del lugar, ofrecen una millonaria recompensa a quien ayude a identificar al asesino.

 

Luego de confirmarse la muerte de un chofer baleado, el sector decidió este lunes que continuará la paralización de colectivos y taxis, estos últimos, hasta la 6 de la mañana en principio, también por el cierre masivo de estaciones de  servicios en medio de la ola de violencia. 

Además, no hay clases, ya que hay una amenaza narco que advierte que balearán escuelas y recomienda a los padres no enviar a sus hijos sl colegio.

Fuerzas de seguridad con "apoyo irrestricto para hacer lo que sea necesario" 

Ante la ola de violencia, el presidente Javier Milei, expresó su apoyo a los familiares de las víctimas y anunció el envío de efectivos de la Policía Federal, la Gendarmería Nacional, la Prefectura Naval y la Policía de Seguridad Aeroportuaria para combatir al narcotrafico. También colaborarán miembros del Servicio Penitenciario.

 

El mandatario acusó al kirchnerismo y el socialismo de "entregar la ciudad a la delincuencia, al tiempo que lamentó los asesinatos y les envió sus condolencias a los familiares. 

"Quiero ser claro: estamos enfrentando a un grupo de narcoterriristas desesperado por mantener el poder y la impunidad. Mientras sea Presidente, no vamos a dejar de perseguirlos. No vamos a dejar de requisar las cárceles. No vamos a titubear cuando la vida de un inocente esté en juego. No vamos a permitir que sigan gobernando Rosario. Las Fuerzas de Seguridad tienen nuestro apoyo irrestricto para hacer lo que sea necesario para reinstaurar el orden.

La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, viaja a a Rosario para estar al frente del gran operativo que comienza este lunes.