06 de Mayo de 2022 - 09:24

La denuncia de Germán Muiño que provocó el suicidio del guarda aduanero, criticada por errores y apresuramiento

El subdirector de Legal y Técnica, un cargo estratégico, consideró que la aparición de sellos de funcionarios aduaneros, en el bolso de un despachante, era motivo suficiente para realizar una denuncia judicial, que recayó en el juez federal Marcelo Martínez de Giorgi. Sin embargo, ningún sello e inclusive firma no tienen valor alguno si no hay validación electrónica de cada exportación o importación. Este viernes 6 de mayo se realizará el sepelio de Omar Ramírez, el guarda que se suicidó, mientras el gremio analiza la realización de medidas de fuerza.

 

Entre 2020 y lo que va del 2021, ya se detectaron 35 toneladas de cocaína en Europa que pasaron por la Aduana argentina, lo que no generó la apertura de ningún sumario de investigación. Sin embargo, el hallazgo de un bolso con documentación de un despachante de Aduana -Pablo Monet-, junto al sello de cuatro empleados del organismo -Javier Lacentra, Martín Toledo, Omar Ramírez (el fallecido) y Sandra Zotta-, sí generó dos acciones concretas encabezadas por el subdirector general de Legal y Técnica, Germán Muiño, que comenzó su carrera en la Aduana en 2016 de la mano de un economista al cual se le debían favores políticos (que se reducían a aparecer en televisión defendiendo posturas ideológicas afines).

Por un lado, Muiño abrió el sumario administrativo 13333-1-2022, el cual le hizo firmar a la directora general de Aduanas, Silvia Traverso. Una persona cercana a ella confía que “además de ser relativamente nueva en la Aduana -desde 2016, al igual que Muiño-, Silvia comete el error de confiar demasiado en Muiño y en (Rodrigo) De Dios”, también subdirector, pero de Reingeniería de Procesos Aduaneros.

La apertura del sumario administrativo podría considerarse lógica, para investigar un hecho detectado por la Policía Federal Argentina (PFA) en la sede central de la Aduana, Azopardo 350. El informe de la PFA sobre el tema se publica hacia el final de esta nota. Sin embargo, también obedece a dos errores -o mala intención, dicen otros- por parte de Muiño. Uno de sentido común y otro del conocimiento más básico de la Aduana.

El primero, tan elemental como un sello con nombre y cargo puede ser apócrifo, además de no certificar nada. Por eso el informe policial apunta como Hecho a “falsificación de sellos oficiales”. El segundo hecho habla del desconocimiento de Muiño de los procesos aduaneros: una firma física, con papel y sello, no tiene valor si no está validada por el sistema informático del organismo, la cual siempre debe ser realizada por un agente del mismo con su clave.

Además las exportaciones, una vez autorizadas, deben ser aseguradas con un precinto, y luego de eso se procede al cumplimiento de la documentación. Es decir, sellos y hasta firmas no tienen validez sin autorización electrónica ni precinto. Si el despachante no tiene precintos, ni siquiera le sirve una carta firmada por la directora general de Aduanas. 

 

Denuncia judicial express: sin investigación previa y "para cubrirse"

 

Si ya el sumario administrativo podía considerarse una exageración, realizar una denuncia judicial parece lisa y llanamente un error. “El procedimiento es que se abre un sumario para averiguar si los elementos son suficientes o no para realizar la denuncia judicial. No tienen que ser espejo uno de la otra”, explicaron a Minuto de Cierre -inclusive con palabras similares- dos aduaneros que pasaron por el área que hoy conduce Muiño.

La interpretación de estas dos fuentes, y de muchas otras, es que Muiño se apresuró para “cuidar su sillón”, aunque en realidad nombraron una parte del cuerpo. De esta manera se refirieron a la exageración de realizar una denuncia antes de tener claro el origen de los hechos. Como tantos funcionarios de política -y no de carrera- a lo largo de la historia, es fácil cortar el hilo por lo más delgado, apuntando a personal de base. Por desgracia, en este caso terminó con el suicidio de un guarda que, además de vivir en un barrio humilde del Gran Buenos Aires, ni siquiera fue visto en un automóvil propio. Con tantos aduaneros que tienen autos de alta gama y propiedades por encima de 3.000 dólares el metro cuadrado, Muiño apuntó contra Ramírez.

 

El gremio, entre el dolor y las posibles medidas de fuerza

 

En el Sindicato Único del Personal Aduanero de la República Argentina (SUPARA) nadie quiere hablar, pero se saben que analizan medidas de fuerza. “No sólo porque Omar era un delegado muy querido, sino también porque ya son muchas las actitudes persecutorias de Muiño”. Entre otras, por ejemplo, cuando este medio reveló un manejo irregular de zapatillas New Balance importadas, en lugar de investigar eso, el subdirector de Legal y Técnica abrió un sumario para averiguar quiénes eran las fuentes de Minuto de Cierre.

Esto fue contado en una nota (https://www.minutodecierre.com/nota/2021-7-8-1-32-0-german-muino-el-subdirector-que-armo-un-expediente-para-averiguar-las-fuentes-de-minuto-de-cierre-lo-comparan-con-la-central-de-inteligencia-de-la-dictadura). Lo más increíble es que a Muiño le importaba más saber quiénes habían revelado la información, y no si el manejo de los contenedores de zapatillas debió haber pagado más impuestos.

Por otra parte, el secretario general del SUPARA, Carlos Sueiro, no es apresurado ni busca un perfil polémico, pero tiene historia en escenarios más difíciles. Durante la última dictadura militar, siendo militante del peronismo, fue uno de los pocos abogados que se animó a presentar habeas corpus para averiguar el paradero de desaparecidos.

Por esas vueltas de la política argentina, la fuerza política que más hizo por la memoria, verdad y justicia desde la vuelta de la democracia -el kirchnerismo, sin dudas- puso en un cargo clave de la Aduana a un funcionario que considera importante averiguar las fuentes de un medio de comunicación, o que realizó una denuncia judicial antes de detectar el origen y la trama de los hechos denunciados.

 

El parte policial, al cual accedió Minuto de Cierre, es el siguiente:

 

*_DIVISION INTERVENCIONES JUDICIALES_*

*ASUNTO:* “COMUNINCAR INTERVENCIÓN CON DETENIDO EN LA DIRECCIÓN GENERAL DE ADUANAS”

*HECHO:* "FALSIFICACIÓN DE SELLOS OFICIALES"

*LUGAR*: Azopardo 350, CABA - Instalaciones de la Dirección General de Aduanas.

*FECHA:* 20/04/2022

*HORA:* 15:15
*HORA INTERVENCION*: 16:55

*DAMNIFICADO / DENUNCIANTE*: Germán Eduardo MIÑO, Subdirector General de Técnico Legal Aduanera, de la Dirección General de Aduanas.

*IMPUTADO*: Fernando Andrés SOJA, DNI Nº 22.719.017, de nacionalidad argentina, de 49 años edad, domicliado en La Guardia 1366, localidad de Quilmes, PBA

*MAGISTRADO:* Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal Nº 8, a cargo del Dr. DE GIORGI, Secretaría Nº 15 de la Dra. LARA.

*RESEÑA*: Esta dependencia fue requerida por el Subcomisario Juan Ramón ONTIVEROS, 2do. Jefe de la División SEGURIDAD Y CUSTODIA ADMINISTRACIÓN FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS (AFIP), por una persona demorada en la Dirección General de Aduanas, sita en la calle Azopardo 350 de esta ciudad.

En el lugar, se determinó que personal policial de la citada dependencia que cumple funciones de seguridad edilicia en el organismo de marras, halló junto a una pared del hall de ingreso un bolso que se encontraba abierto y en el que, a simple vista, se veía un sello cuyos datos correspondían con los de un empleado aduanero, quien informó que el bolso no era de su pertenencia, por lo que se dio aviso a las autoridades de la Dirección General de Aduanas.

El bolso fue trasladado por el personal policial interventor a la Oficina de la Directora General de Aduanas, Dra. Silvia Brunilda TRAVERSO, en donde establecieron que había más sellos de otros empleados y documentación aduanera.

Posteriormente, se hizo presente el Señor Fernando Andrés SOJA y refirió ser propietario del bolso hallado, por lo que fue demorado hasta el arribo del personal de esta dependencia, sumado a que el Subdirector General de Técnico Legal Aduanera, Señor Germán Eduardo MUIÑO, se constituyó como denunciante.

En presencia de dos testigos solicitados al efecto, se requisó el bolso hallado por el personal interventor, conteniendo el mismo cuatro sellos con datos de empleados de la Dirección General de Aduanas y formularios de "designaciones de importación", por lo que se tomó contacto con los mismos, quienes no reconocieron los sellos como propios.

En ese orden, se efectuó consulta con la titular de la Secretaría actuante, quien dispuso labrar actuaciones caratuladas "Falsificación de Sellos Oficiales"; la detención del imputado SOJA en calidad de incomunicado, y que sea trasladado a esta dependencia a fin de llevar a cabo las diligencias procesales de rigor, tras lo cual deberá ser alojado en la Alcaidía Madariaga a disposición de ese Tribunal; proceder al secuestro del bolso con los elementos que contiene; y recibir declaración testimonial al personal interventor y al representante del organismo.

No se hicieron presentes medios periodísticos
 

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