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El cuestionado empresario uruguayo Juan Sartori, que vivió la mayor parte de su vida fuera del país y nunca ejerció el derecho al voto, apareció hace pocos meses en Uruguay y sobre la base de una abultada billetera cambió la forma de hacer política, comprando grandes espacios en los medios de comunicación y contratando a sospechosos asesores internacionales para su campaña de derribar competidores, como el “rey de la propaganda negra”, el venezolano Juan José Rendón, un famoso especialista en desinformación e impulsor del rumor como arma de propaganda política de desprestigio para aniquilar a los contrincantes de oposición y del mismo partido político.

Es significativo que como nunca antes en Uruguay, aparecieron en forma masiva “fake news” en contra de los propios compañeros de partido de Sartori – el Partido Nacional (PN)- con ataques y agravios intentando desestabilizarlos, más allá que el propio Sartori diga que contrató a Rendón “para defenderlo”.

El millonario empresario llegó y se instaló en Uruguay hace muy pocos meses en compañía de su esposa rusa, Ekaterina, hija del multimillonario Dmitri Rybolovlev, dueño del club Mónaco y sospechado de negocios ilícitos, por los cuales ha estado detenido y se le ha quitado el pasaporte, mientras dure la investigación. El magnate ruso compró la isla de Skorpios, que fuera de Onassis, para regalársela a su hija.

Mientras su yerno Juan Sartori, busca ser el candidato único del histórico Partido Nacional, (blancos), sus acciones son cuestionadas fuera y dentro del ámbito de la política. Es famosa la entrevista en el canal VTV de Uruguay, donde el empresario devenido en actor político, pasó el papelón de su vida al no saber responder cual era el salario mínimo nacional y a cuanto alcanzaba el índice de desempleo en el país que piensa presidir.

Insólitamente su mayor relación ha sido con la izquierda y con el gobierno de José Mujica, que le otorgó a Sartori la licitación para plantar la marihuana legal en Uruguay, negocio que luego dice haber vendido y que le reportó una ganancia de más de 50 millones de dólares.

Tan cercano ha sido de Mujica, que increíblemente fue al expresidente izquierdista a quien Sartori viajó a consultar para saber si debía ser o no candidato por un partido rival, como reconoció el propio Mujica.

No es todo, tuvo como asesor de sus empresas a Diego Cánepa, el prosecretario del gobierno mujiquista y enemigo acérrimo del Partido Nacional. Todo esto ha despertado algunas sospechas dentro del propio entorno partidista sobre si no es un “Caballo de Troya” infiltrado en el partido para devolverle favores a quienes le otorgaron el negocio de la marihuana legal en el país.

El reconocido consultor internacional en política y asesor de candidatos, Luis Costa Bonino, Doctor en Ciencias Políticas radicado en París, dijo en Twitter: “A la luz de la opción de Sartori por una campaña de destrucción de los otros candidatos del PN, pienso que su objetivo no es ser Presidente, sino jugar para el Frente Amplio, tener una bancada y darle mayoría parlamentaria a otro gobierno del FA que sea generoso con sus negocios”, explicó.

Luego Costa Bonino agregó: “Sartori importó lo más sórdido de campañas mexicanas y centroamericanas: delitos electorales, difamación anónima a candidatos por telemarketing y redes sociales, compra de votos con tarjetas. Un emprendimiento sucio de destrucción del Partido Nacional, un insulto a su historia”, aseguró el experto. Las tarjetas de “medicamentos gratis”

Pero hoy Sartori ha salido a entregar la tarjeta “Medicfarma” a los jubilados y pensionados, prometiendo que a partir del primero de marzo de 2020, será válida solo si sale presidente. Con dicha tarjeta los ancianos podrían retirar medicamentos gratis en las farmacias, siempre y cuando Sartori gane las elecciones.

“Después que la recibas llamanos por WhatsApp, para saber que la recibiste”, pide Sartori desde un spot publicitario, donde hace posar a los jubilados recibiendo la tarjeta “Medicfarma”, pero en ningún momento del mensaje en video, advierte que solo tendría validez si él gana las elecciones. Por este “olvido” será denunciado penalmente por el precandidato del Partido Colorado Ernesto Talvi, por engaño. "Sartori dice a cámara, sin matices ni condiciones que ‘con esta tarjeta cualquier jubilado o pensionista podrá obtener sus medicamentos gratis'. Estamos localizando alguno y lo acompañaremos a una farmacia. Si no se los dan, haremos la denuncia por engaño. ¿O hay otra palabra?", pregunta Talvi.

Pero hay otra realidad que Sartori prefiere ignorar; ya hoy se entregan los medicamentos sin costo a las personas de cualquier edad que se atienden en Salud Publica, pero eso el millonario no lo dice.

Sartori no explica de donde saldrán los millones para financiar tal proyecto, que, incluso, desde su propio sector lo ven impracticable. Según Mario Cabrera, asesor del empresario en temas de salud, en declaraciones al diario El Observador, dijo que “más allá de que sea gratis algo para alguien, no puede ser para todos. Eso es imposible”, aseveró el experto desmintiendo a su jefe.

Pero antes, Juan Sartori, deberá sortear varios obstáculos; ganar primero la interna partidaria, convertirse en candidato único y luego vencer en las elecciones nacionales, instancia aún más difícil de lograr para un precandidato que parece conocer poco de la realidad del país.

Para muchos, todo parece algo poco serio dirigido a personas de la clase pasiva, que quedarán esperando por algo nada tangible de concretar.

Con sorna, algunos humoristas señalan una paradoja que no deja de ser una realidad: “Primero, Sartori plantó la marihuana que enferma a muchos uruguayos y luego te da la tarjeta con remedios supuestamente gratis para curarte. ¿Así piensa cuidar la salud de los ciudadanos?”, preguntan