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Por primera vez en su historia comercial, Argentina exportará harina de soja al mercado chino. Se trata de un envío de 30.000 toneladas del principal producto agroindustrial del país, que partirá en los próximos días y tiene como destino final el gigante asiático, con llegada estimada en septiembre.

Este acuerdo comercial se concreta seis años después de que las autoridades de Beijing habilitaran oficialmente la importación de harina de soja argentina, producto que hasta ahora no había logrado ingresar efectivamente a ese mercado.

La operación realizada este jueves responde a una “prueba” solicitada por empresas chinas dedicadas a la producción de alimentos para animales, que buscan diversificar proveedores en un contexto de creciente tensión comercial entre China y Estados Unidos.

Argentina es actualmente el mayor exportador mundial de harina y aceite de soja, además de ocupar el tercer puesto en ventas internacionales de soja sin procesar. Por su parte, China consume anualmente más de 70 millones de toneladas de este producto, lo que representa un mercado de dimensiones colosales para los exportadores argentinos.

El conflicto arancelario entre Pekín y Washington llevó a los compradores chinos a buscar nuevas fuentes de abastecimiento más estables. En este escenario, Argentina se posiciona como un socio estratégico, junto con Brasil, para garantizar el suministro de insumos clave para la producción de proteína animal en Asia.

Exportaciones argentinas de soja a China: datos y proyecciones

Según cifras de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), durante 2024 Argentina exportó a China un total de 4,09 millones de toneladas de grano de soja, por un valor de US$1.762,1 millones. Además, se despacharon 490.000 toneladas de aceite de soja hacia el mismo destino, generando ingresos por US$439,2 millones.

Si bien hasta ahora el grueso de las exportaciones se concentró en granos y aceites, la apertura efectiva del mercado chino a la harina de soja podría multiplicar significativamente el ingreso de divisas. Este producto representa el corazón del complejo agroexportador argentino, no solo por su volumen, sino también por su capacidad de generar divisas.

El rol clave de la harina de soja en el comercio exterior argentino

La harina de soja es el principal bien exportado por Argentina. Solo en mayo de este año, el complejo agroexportador liquidó US$3.054 millones, en gran parte debido al avance de la cosecha de soja, según datos conjuntos de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC).

En el acumulado de los primeros cinco meses de 2024, el ingreso total por exportaciones del sector alcanzó los US$11.713 millones, lo que da cuenta de la importancia del complejo sojero en el comercio exterior argentino.

En ese mismo período, las exportaciones de harina y pellets de soja acumularon ingresos por US$3.378,4 millones, considerando el valor FOB. Según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), los derivados de soja generaron US$10.560 millones en lo que va del año, lo que equivale al 13,2% del total de exportaciones de bienes del país, consolidándose como la principal fuente de divisas de la economía nacional.

Proyección a futuro: ¿una nueva etapa para el complejo sojero?

Con este primer envío de harina de soja a China, Argentina da un paso clave para diversificar destinos de exportación en un contexto global marcado por disputas comerciales y reconfiguraciones geopolíticas. De consolidarse este canal, se abrirá una oportunidad histórica para ampliar el volumen y valor agregado de las exportaciones del principal complejo productivo del país.

Mientras tanto, el sector agroindustrial argentino sigue demostrando su capacidad de adaptación y competitividad en los mercados internacionales, reafirmando su rol como pilar central del ingreso de divisas y motor de crecimiento económico en un contexto interno desafiante.