21 de Octubre de 2024 - 10:26

El ministro de Producción sanjuanino viajó a Chile con gastos pagados por Lundin, y se enfrenta a una posible demanda por dádivas

Tras el pedido de informes de un legislador libertario, por millonaria compra directa de útiles escolares, el clima político cambió en San Juan. Ahora analizan demandar al ministro Gustavo Fernández por dádivas. Un viaje suyo pagado por Lundin Mining Corporation no sólo puede configurar delito, sino que además deja a su par de Minería, Juan Pablo Perea, como un funcionario “pintado”.

La “luna de miel” entre nuevos gobiernos y la sociedad que representan, que supuestamente dura 100 días, puede dar lugar a errores formales que más adelante se pagan caros. El 25 de enero de este año, a partir del decreto 127, el gobernador sanjuanino Marcelo Orrego y el ministro de Producción, Gustavo Fernández, avalaron un viaje de este último a Chile, pagado por Lundin Mining Corporation. En el decreto, de apenas dos artículos más uno de forma, se explica que Fernández viajó “en misión oficial” para acompañar al gobernador Orrego “a la visita de las oficinas y yacimientos mineros que la Compañía Lundin Mining tiene en la República de Chile, que se llevará a cabo el 16 de enero”.

Para sostener la ideología libertaria, según la cual “no hay plata”, en el artículo 2 del decreto se puntualiza que “el viaje del citado Funcionario -Fernández- no genera gasto alguno, por haber sido invitado por Lundin Mining Corporation”. Con esta simple oración -no llega siquiera ser párrafo-, el ministro de Producción sanjuanino podría estar violando la Ley 25.188, de Ética en el Ejercicio de la Función Pública; como también los artículos 256 a 258 del Código Penal; por cohecho (soborno) o negociaciones incompatibles con la función pública. Y todo por un simple viaje a Chile, país limítrofe con San Juan.

La visita de Orrego y Fernández a Chile tuvo impacto político cuando se hizo, como también podría tenerlo ahora. En aquel momento, la pregunta extendida y casi obvia es por qué no fue el ministro de Minería, Juan Pablo Perea. “Por estar pintado”, coincidieron casi todos, en un bajo protagonismo eclipsado por Fernández que continúa hasta ahora.

En cuanto al presente, la semana pasada sorprendió el pedido de informes de Fernando Patinella, diputado provincial de La Libertad Avanza (LLA) por la compra directa de kits escolares al jubilado José Nazareno Gazze, amigo personal y socio político del gobernador Orrego. Algunos lo leyeron como un cambio de clima político, pues se supone una alianza tácita entre el PRO, partido al cual pertenece el gobernador, y los libertarios.

Este fin de semana, tras algunos posteos y comentarios en la capital sanjuanina, la duda es si Patinella, o algún otro miembro de la oposición “dialoguista”, se toman del caso Fernández-Lundin para desgastar a Orrego, esmerilando también al débil Perea. La mesa está servido, falta esperar si los comensales se sientan a aprovecharla.

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