Los vecinos de San Isidro temen que la voracidad rematadora de Ramón Lanús llegue al Parque Ribera Norte, con el espejo no deseado del Parque de la Costa
Durante su paso por un organismo nacional, el candidato a intendente Ramón Lanús entregó bienes, a menos de su tasación oficial, por más de u$s 800 millones. También intentó lo mismo con el Golf de Villa Adelina. Crece la versión que podría replicar ese modelo en el codiciado Parque Natural Municipal Ribera Norte. El ejemplo del Parque de la Costa, donde su dueño sueña con un hotel 5 estrellas en una isla ubicada enfrente.
Los vecinos de San Isidro saben que son el municipio de Zona Norte -y de todo el Conurbano- con mejor acceso público a la costa del Río de La Plata, como también líder en conservación ambiental. En comparación, vieron cómo la voracidad del sector inmobiliario fue quitando metros de costa, y calidad de vida para todos los ciudadanos, en Vicente López o Tigre. Una problemática que se reactualizó tras conocerse que el candidato a intendente de Juntos por el Cambio, Ramón Lanús, tiene un pasado como funcionario nacional de remate -literalmente- de espacios públicos.
De acuerdo a un informe de la Auditoría General de la Nación (AGN), presidida por el opositor -y miembro de Juntos por el Cambio- Miguel Angel Pichetto, y con un dictamen de voto unánime, Lanús entregó inmuebles del Estado Nacional a particulares por un valor de u$s 842 millones, pero siempre cobrando menos de lo que esa tasación oficial -establecida en cada caso por el Tribunal de Tasaciones de la Nación- establecía. Lanús hizo esto mientras presidía la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE).
Según el informe de la AGN, el 77% de los bienes entregados por Lanús entre 2015 y 2019 están ubicados en la Ciudad de Buenos Aires. Su impronta de remate incluyó uno de los espacios públicos de San Isidro, el Golf de Villa Adelina. También intentó vender los terrenos de Radio Nacional en General Pacheco, el club ex ECOSOL en Tigre y el Bouchard en Vicente López, entre otros bienes.
Temor por Ribera Norte, y el espejo no deseado del Parque de la Costa
Con los antecedentes de Lanús en la AABE, y el del Golf Villa Adelina específicamente, se instaló que el candidato a intendente ya le "echó el ojo" al Parque Natural Municipal Ribera Norte. Un pulmón verde de 50 hectáreas con salida al Río de la Plata, creado como tal en 1982 e inaugurado en 1998. El cuidado de este sistema de biodiversidad es tal, que las visitas sólo pueden hacerse durante un horario limitado, y con un máximo que suele ser de una hora por persona.
En la mirada de Ramón Lanús, este paraíso casi urbano de flora y fauna, con guardaparques que evitan la propagación de especies exóticas, es un lugar ideal para -por ejemplo- un eco-hotel boutique. Hace poco, otro casi activó alertas similares. En Alvear y el río, con la concesión del Malloy´s Bar que vence a fin de año, se habilitó la construcción de un barrio privado que comercializa la inmobiliaria Narváez. Para 8 mansiones exclusivas, pero quitándole un espacio público valorado a los sanisidrenses.
Por otra parte, los vecinos de ese municipio tampoco quieren repetir un modelo como el Parque de la Costa, ubicado en Tigre. El mismo, al borde de la desaparición, fue tomado por un empresario de entretenimientos con apoyo económico tanto del municipio como de la Provincia de Buenos Aires. "No queremos que plata del municipio, ni de la provincia, financie emprendimientos que nos quitan nuestra ribera", apuntó furioso un ambientalista bajo reserva de su nombre.
También recordó un proyecto trunco del dueño de Parque de la Costa: construir un hotel en una isla ubicada frente al mismo. Las islas que bordean el Río de la Plata -con la excepción de Martín García- son de origen sedimentario y no rocoso. Es decir, se fueron formando con el tiempo. Cualquier modificación producida por el hombre en las mismas puede romper su ecosistema. La gente de San Isidro no quiere ver eso en su preciada costa.
