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El hecho es enteramente del sector privado, nada tiene que ver con la gestión del ministro de Salud porteño, Fernán González Bernaldo de Quirós, conocido sintéticamente como Fernán Quirós. Pero el tamaño y nombre de la empresa de la cual fue despedido su hermano generó muchos comentarios hacia al interior del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. 

Rodrigo González Bernaldo de Quirós era Regional Supply Chain Manager de Cencosud, algo así como un Jefe de Compras regional. De hecho, todavía figura con ese cargo en su perfil de Linkedin, pues el despido o salida consensuada fue hace alrededor de un mes. “Hay una especie de tema tabú en Cencosud, nadie quiere hablar del tema. Pero admiten que la salida de Rodrigo Quirós ocurrió hace alrededor de un mes y fue tumultuosa”, le contó a Minuto de Cierre una fuente ligada a la empresa de capitales chilenos. 

El cargo del hermano del ministro implicaba la mayor responsabilidad con respecto al gasto de la compañía, nada menos que la compra a proveedores. Por ello, los comentarios -todos en estricto off the record- apuntan a un tipo de relacionamiento incorrecto entre Quirós y los proveedores. Por otra parte, algunos cargan las tintas sobre el ex gerente, mientras que otras fuentes que había responsabilidad de muchos ex empleados del área, con cierto desconocimiento de Quirós. Los que abonan esta segunda hipótesis remarcan el hecho que el hermano del ministro no fue el único despedido, sino que alrededor de diez personas más siguieron el mismo camino.

“Por desgracia, las relaciones incorrectas entre departamentos de compras y proveedores son habituales en el supermercadismo. Cada tanto, las diferentes cadenas hacen una purga buscando corregirlo. Pero cambian los actores y se repiten los problemas”, admite una fuente del sector. “No quiere decir que sólo ocurra en supermercados, pero por los números grandes que se manejan, el tema es complejo y recurrente”, admitió.

Comentarios e intrigas en el gobierno porteño

Si bien el accionar del hermano del ministro nada tiene que ver con el ministro Quirós, las susceptibilidades son mayores en épocas de campaña. Pandemia mediante, el jefe de Salud es el ministro más conocido, y quizás el de mejor imagen, del gabinete de Horacio Rodríguez Larreta. Para el jefe de Gobierno y aspirante a presidente en 2023, Quirós es un activo electoral importante. Sin embargo, eso mismo también genera celos en otros integrantes del gobierno porteño.

Los más críticos y memoriosos, aunque no desconocen el gran trabajo que hizo Quirós en medio de la pandemia del COVID-19, apuntan que por los menos dos tipos de contratos clave del área de Salud no se auditan desde 2016, ambos vinculados a los hospitales públicos: lavaderos de ropa y provisión de alimentos y catering. Si bien Quirós es ministro de Salud desde el comienzo de este mandato, a fines del 2019, el ex vicedirector de Planeamiento Estratégico del Hospital Italiano, y además médico graduado con honores en la UBA, podría haber tomado la decisión de licitaciones más claras y mayores controles aún antes de la pandemia, pero sin embargo no lo hizo.

En esos dos renglones clave de la estructura de hospitales públicos, lavandería de ropa de cama y alimentos, los contratos originados en el 2016 duraban hasta el 2018, se prorrogaron hasta el 2019, como estaba permitido, y cuando era tiempo de cambios no se hicieron. “Están los mismos proveedores desde el 2016, con un sistema que utiliza más la compra directa que las licitaciones. Un esquema que nadie se anima a cambiar”, apunta un funcionario con silla en el edificio vidriado de la calle Uspallata.

Por otra parte, algunos apuntan que entre 2015 y 2019 Quirós atendió “los dos lados del mostrador”. Mientras seguía con su cargo en el Hospital Italiano, también fue asesor del ministerio que hoy encabeza -entre 2015 y 2019-, tal como consta en su declaración jurada. “Estoy seguro que Fernán está limpio, pero cualquier cosa que lo manche no nos conviene”, evalúa un funcionario de la administración Rodríguez Larreta.