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La jefa de dictámenes jurídicos de la AFIP, Marina Lamagrande, fue desplazada de su cargo. Los más amables con ella dirán que renunció, pero en realidad la echaron por pedido de un ministro. Aunque nadie se anima a decir quién es, el hecho es que Marina Lamagrande -CUIT 27-17203344-5- dejó el cargo de Director de Técnico Jurídico.  

Lamagrande fue la responsable del dictamen de AFIP que puso tras las rejas a Cristóbal López y Fabián de Sousa, los dueños de Oil Combustibles, emitido en 2016 mediante la Disposición 395. Allí Lamagrande determinó que "se impida en los sistemas la posibilidad de que la firma Oil Combustibles pueda acogerse al régimen de Regularización excepcional" de deudas del organismo, avalando lo actuado por el juez federal Julián Ercolini.

Recién para agosto del 2019 se supo la verdad sobre la deuda y el dictamen de Lamagrande. La deuda de Oil Combustibles con la AFIP no era de $ 8.000 millones sino de $ 2.200 millones, de los cuales $ 1.600 millones ya habían sido pagados. Así lo certificó una pericia oficial del Tribunal Oral Federal 3, validada por una perito de la Corte Suprema de Justicia, dos del Ministerio Público Fiscal, dos de la AFIP (como querellante), más 3 representantes de la defensa.

Es decir, el dictamen de Lamagrande había mentido sobre los números, nada más ni nada menos. A pesar de eso, el recién llegado subdirector de Coordinación Técnico Institucional, Juan Capello, la sostenía en el cargo. Hasta hoy, cuando la titular de la AFIP decidió que ya no había forma de apoyarla.