11 de Febrero de 2015 - 10:02

Isenbeck es nuevo sponsor de Boca, sólo en la cancha

Isenbeck, una marca de cerveza que se promociona como premium, ganó una batalla de marketing, luego de más de una década de asociación comercial logró desplazar de la cancha de Boca Juniors a Quilmes, en principio por dos años

“Se trata de un acuerdo para ser la única marca de cerveza con presencia en el estadio. Ya está todo acordado y ya para el próximo fin de semana que empieza el campeonato se podrá ver la estática de Isenbeck en la Bombonera”, agregaron. La marca acordó con club xeneize un canon de alrededor de $4 millones por año y el acuerdo sería por 24 meses.

Para presentar oficialmente esta alianza, Isenbeck realizará el Día de los Enamorados una acción que “apelará a lo emoción asociada al amor y el romance y haciendo hincapié en el sentimiento que une a un club con sus fanáticos”. Esta acción es el puntapié inicial de la alianza que se desarrollará durante 2015 y presentará nuevas acciones que involucra particularmente a los hinchas.

“Están en estudio otras acciones de marketing para este año”, especificaron desde la cervecería, pero se encargaron de aclarar que en ningún caso incluye presencia en la vestimenta oficial de Boca Juniors –que hoy está sponsoreada por Nike, BBVA Francés y Citroën–.

Lo único que queda por resolver es qué va a suceder con la cerveza sin alcohol que se ofrece en los palcos de la Bombonera. Frente a la prohibición de vender alcohol en eventos deportivos, se ofrecía la Quilmes Lieber, e Isenbeck no posee ninguna marca dentro de esa categoría –en la Argentina opera las marcas Isenbeck, Isenbeck Dark, Warsteiner y Miller Genuine Draft–.

Aunque Isenbeck siempre se escudó en su rol de ser una de las marcas más “chicas” peleándole mercado a un “gigante”, en realidad esconde una disputa mucho más global ya que tanto Quilmes como Isenbeck forman parte de la cartera de marcas de las dos empresas más grande del mundo Ambev (Quilmes) y SabMiller (Isenbeck).

El mercado de la cerveza en la Argentina fue creciendo hasta convertirse en la bebida alcohólica más consumida en el país. En la década del 90, el consumo per capita por año rondaba los 19 litros, mientras que en la actualidad se incrementó en más de 100% alcanzando los 41 litros.

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