12 de Marzo de 2025 - 08:38

Comenzó el juicio por la muerte de Diego Maradona

El 25 de noviembre de 2020, la Argentina quedó sumida en la conmoción y el dolor tras la muerte de Diego Armando Maradona. Cuatro años y medio después, la Justicia deberá determinar si su fallecimiento era inevitable o si, por el contrario, se debió a una mala praxis médica que pudo haberse evitado con una atención adecuada. Este es el eje central del juicio oral que comenzó este martes en una pequeña sala ubicada en el primer piso de los Tribunales de San Isidro.

El tribunal a cargo del proceso está compuesto por los jueces Verónica Di Tommaso, Maximiliano Savarino y Julieta Mackintach, quienes serán los encargados de definir si los siete acusados son culpables del delito de homicidio simple con dolo eventual o si, en cambio, no hay responsabilidad penal. En caso de que sean condenados, los profesionales de la salud que atendieron al astro podrían enfrentar penas de entre ocho y 25 años de prisión. La figura del dolo eventual implica que, aunque no haya existido una intención directa de causar la muerte, los imputados debieron haber previsto que sus acciones podían conducir a ese desenlace.

Para sustentar la acusación, los fiscales Patricio Ferrari y Cosme Iribarren se basan no solo en el estado de la casa en la que Maradona pasaba sus días, que distaba mucho de cumplir con los estándares de una internación domiciliaria, sino también en los mensajes que intercambiaban los médicos a cargo de su cuidado. Entre esos chats se encuentran frases como "se va a morir", "acomodemos la historia clínica" y "podemos perder la matrícula y terminar en cana". Según la fiscalía, estas conversaciones reflejan que los profesionales eran conscientes del riesgo y no hicieron nada para evitar el desenlace.

No obstante, debido a que la figura de homicidio con dolo eventual no es de uso frecuente en estos casos, los fiscales presentan además acusaciones subsidiarias: abandono de persona, con penas de hasta seis años de prisión, y homicidio culposo, cuya pena mínima es de un año y puede llegar hasta cinco. Esta última es la calificación que generalmente se aplica en situaciones de mala praxis médica.

Junto con la fiscalía, intervienen cinco querellas, ya que los familiares de Maradona no lograron unificar su representación legal. Por un lado, Dalma y Giannina están representadas por el abogado Fernando Burlando; por otro, Dieguito Fernando cuenta con la defensa de Mario Baudry; Jana es representada por Félix Linfante, mientras que Diego Junior tiene como letrado a Luis Rey Ramírez. Finalmente, las hermanas del exfutbolista son asesoradas por Matías Jurado. Todos buscan la pena máxima para los acusados. En el transcurso del proceso, Burlando y Baudry intentaron sin éxito que también se enjuiciara a Matías Morla, exrepresentante de Maradona.

Los profesionales de la salud más comprometidos en la causa son el neurocirujano Leopoldo Luque, la psiquiatra Agustina Cosachov y el psicólogo Carlos Díaz. También enfrentan cargos los enfermeros Ricardo Almirón y Mariano Perrone, mientras que Daiana Madrid será juzgada por separado tras optar por un juicio por jurados. La estrategia de sus defensas apunta a sostener que hicieron todo lo posible para ayudar a Maradona a sobrellevar sus adicciones y sus enfermedades preexistentes. Argumentan, además, que el exfutbolista era una persona difícil de manejar y que su fallecimiento se debió a un ataque cardíaco inesperado, ya que no tenía antecedentes de problemas coronarios.

Sin embargo, el informe de la junta médica que intervino en la investigación, integrada por 22 expertos, concluyó que hubo mala praxis. Por ello, a medida que avance el juicio, es probable que la estrategia de defensa se incline hacia la figura de homicidio culposo, que contempla penas excarcelables, en lugar de buscar la absolución total.

Uno de los puntos clave del caso es el momento en que Maradona fue dado de alta de la Clínica Olivos. En ese entonces, el director de la institución dejó asentado que el exjugador debía ser trasladado a un centro especializado en adicciones, pero en su lugar fue llevado a una casa en el country San Andrés. Esta decisión fue avalada con la firma de Dalma y Giannina, lo que la defensa utilizará para argumentar que la familia tuvo un rol activo en la decisión. No obstante, los abogados querellantes señalarán que la dieta de Maradona en sus últimas horas, que incluyó sándwiches de miga de jamón crudo, no era adecuada para su estado de salud y evidencia la falta de cuidados médicos.

El juicio se llevará a cabo con una frecuencia de dos a tres audiencias por semana, por lo que, debido a la cantidad de testigos citados, se estima que el proceso durará entre cuatro y cinco meses. Se espera que el fallo se conozca hacia fines de julio, momento en el cual, finalmente, la Justicia dará su veredicto sobre las circunstancias que rodearon la muerte de Diego Maradona.

Comentarios