Las perspectivas del FMI para la economía mundial: qué proyecta para la Argentina
El FMI difundió este martes en Washington una nueva edición del informe de Perspectivas de la Economía Mundial, donde ratificó que la economía argentina crecerá 5,5% en 2025 y 4,5% en 2026, mientras que la inflación se ubicaría “en torno al 18%-23% anual” durante el año próximo.
A escala global, el organismo ajustó levemente su previsión de crecimiento económico mundial para 2025, ubicándola en 3%, una revisión al alza de 0,2 puntos porcentuales en relación con el informe publicado en abril.
El FMI destaca señales de recuperación en Argentina
Durante la presentación del reporte, Pierre-Olivier Gourinchas, economista jefe y director del Departamento de Estudios del FMI, se refirió puntualmente al caso argentino y sostuvo que el país atraviesa una recuperación importante.
“Este es, sin duda, un avance muy positivo. Se sustenta en mejoras en la confianza, el crédito y los salarios reales, todo ello gracias a un proceso de deflación muy sólido hasta la fecha, con una inflación que se espera que para finales de este año se sitúe en un rango de entre el 18% y el 23% anual”, explicó el funcionario.
Inflación global y tensiones comerciales
En cuanto a la evolución de los precios, el FMI anticipó que la inflación promedio mundial se reducirá al 4,2% en 2025 y al 3,6% en 2026. No obstante, el informe advierte que las trayectorias inflacionarias presentan fuertes diferencias entre países.
“El panorama general oculta notables diferencias entre países, y las previsiones predicen que la inflación se mantendrá por encima de la meta en Estados Unidos y será más moderada en otras economías grandes”, indica el reporte del Fondo.
Gourinchas también se refirió a la dinámica inflacionaria en Estados Unidos: “Aunque la inflación global continúa disminuyendo, los últimos datos de precios sugieren que las presiones inflacionarias están aumentando gradualmente en EEUU”, dijo.
“En general, los precios de importación de EEUU en dólares han permanecido en gran medida sin cambios o incluso han aumentado este año, lo que sugiere que el costo de los aranceles será asumido por los minoristas estadounidenses y, eventualmente, por los clientes a medida que las empresas comiencen a trasladar los costos más altos a sus precios”.
Factores que influyen en el escenario global
Entre las variables que influyeron en la revisión de las proyecciones, el FMI destacó una relajación parcial en las políticas arancelarias de Estados Unidos. En mayo, Washington decidió moderar las tensiones comerciales con China y revisar los aranceles aplicados a varios de sus socios comerciales.
Esa decisión redujo la tasa efectiva de aranceles del 24% al 17% aproximadamente, aunque el FMI aclara que:
“A pesar de estos desarrollos positivos, los aranceles siguen siendo históricamente altos y la política global sigue siendo altamente incierta, con solo unos pocos países habiendo alcanzado acuerdos comerciales completamente desarrollados”.
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