11 de Octubre de 2018 - 10:51

"Quédese tranquila, usted nunca se arrodilló. Su orgullo es infinito"

Miguel Pichetto le respondió a Cristina Fernández en un cruce picante que tuvieron esta tarde en el Senado, durante el debate por la anulación del aumento del gas: "Respete porque yo la escucho siempre con atención... quédese tranquila, usted nunca se arrodilló...". El proyecto votado por el Senado

La rivalidad entre ambos senadores volvió a estallar en el cierre del debate, cuando el rionegrino estaba al uso de la palabra y reivindicaba el rol del Senado en el freno a la aplicación del plus en las tarifas de gas. Pedía “valorizar” lo hecho por el cuerpo porque "sino los periodistas y los tuiteros de la Argentina están diciendo cualquier cosa. La paramos esta medida, no se va a aplicar a los usuarios y si encima somos estúpidos y no reconocemos nada sin duda la visión de la sociedad de esta institución va a ser negativa".

Al parecer la expresidente se sintió aludida porque si bien ella y su bancada votaron el proyecto de comunicación instando a dejar sin efecto la resolución de Energía, Cristina fue crítica de que el Estado termine compensando a las distribuidoras, en definitiva "fondos públicos", había dicho en su dura exposición.

"Acá paramos esta medida, lo que importa en la política es el mensaje, la ex presidenta debería saberlo, es un mensaje político", lanzó Pichetto cuando al parecer -la senadora no tenía micrófono- ella exclamaba: "¿Quiere que me arrodille? Nunca me arrodillé...!"

"Quédese tranquila, usted nunca se arrodilló. Su orgullo es infinito", cerró Pichetto el episodio.

Por otra parte el Senado aprobó hoy por unanimidad un proyecto de comunicación que apunta a dejar sin efecto la resolución que aplicó un aumento adicional retroactivo en las tarifas del gas y encomendó al Poder Ejecutivo negociar una alternativa con las empresas, "sin costo para los usuarios".

La iniciativa, que se aprobó con 63 votos, plantea "dejar sin efecto" la resolución 20/2018 por la cual la Secretaría de Energía estableció fijar en las tarifas de gas a partir de enero próximo un aumento adicional en 24 cuotas para compensar a las empresas distribuidoras de gas por la devaluación.

Además, en el segundo de sus dos únicos artículos el proyecto encomienda al Poder Ejecutivo que lleve adelante "negociaciones con las empresas proveedoras de gas natural, sin costo para los usuarios". La iniciativa unificó cinco proyectos de ley que apuntaban a derogar la resolución y que el conjunto de la oposición iba a tratar de aprobar en la sesión de esta tarde, hasta que el Gobierno les comunicó que dejaría sin efecto la medida.

El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, concurrió personalmente al Senado horas antes de la sesión a informar esto a los jefes de bloque, tras lo cual los senadores de Cambiemos y del Bloque Justicialista acordaron aprobar el proyecto de comunicación. La intención, según indicó un senador de Cambiemos, fue realizar con la aprobación de este proyecto "una manifestación política" y así lo demostró también el jefe del Bloque Justicialista, Miguel Pichetto, al destacar en el recinto que "el Senado paró esta medida, no se va a aplicar a los usuarios"

En este sentido, Pichetto destacó que la decisión de consensuar este proyecto se tomó "en un marco de diálogo institucional con el Poder Ejecutivo y el Senado" para "derogar la resolución tremenda que significaba hacer pagar el coste de la devaluación en materia tarifaria a los usuarios".

Por su parte, la senadora del Frente para la Victoria, Cristina Fernández, advirtió que "no es posible" que el Senado derogue una resolución con un proyecto de comunicación, ya que "la única manera es con una ley" y criticó que el Estado se haga cargo del pago de ese aumento."De repente el Estado se va a hacer cargo con recursos públicos de pagar esto y no es justo. Hay que pensar en la legalidad y los antecedentes de afectar recursos públicos para equilibrar balances de compañías privadas", afirmó la senadora.

"Yo creo en los esfuerzos compartidos y allí no solamente está la sociedad, que entendió el sinceramiento tarifario, lo que significó la fiesta de los subsidios con los que un ciudadano de la Capital pagaba menos de lo que se paga en el interior, pero ahora corresponderá al Gobierno encarar una negociación con los productores", indicó.

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