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Por Antonio D'Eramo

El ministro de finanzas Luis Caputo defendió la medida de colocación deuda a 100 años con una tasa del 7,9% por un total de 2.750 millones de dólares ante los periodistas acreditados en el Palacio de Hacienda. Pero una vez conocida la noticia y la apología del jefe de la cartera de finanzas nacionales comenzaron las críticas de distintos economistas que piensan en algún caso, que se "hipoteca al país", en otro, que "no están dadas las condiciones" para la emisión de un título de deuda de estas características.

Algunas de las reflexiones registradas durante la jornada fueron en forma de tweet como los de Carlos Rodríguez, ex viceministro de economía, rector de la UCEMA, ultra ortodoxo en materia económica, sostuvo: "El país les ruega no más deuda y ellos toman a 100 años sin explicar". Y, se pronunció a favor de que "vuelvan las protestas por esta medida". Otro ex funcionario del Palacio de Hacienda fue el ministro favorito de Crisitina Fernández, Axel Kicillof. actual diputado nacional, claramente, en la vereda de enfrente ideológica de Carlos Rodríguez, utilizó, sin embargo, la misma herramienta de comunicación y en sus tweets se lee: "Así no se puede seguir. El gobierno de Macri se dispone a colocar deuda por un siglo. Sí, í100 años! Deuda que se va a pagar por 10 generaciones". Y agregó: "Macri piensa emitir a una tasa que nos va a hacer pagar hasta 8 veces el capital que nos prestan, según las agencias de noticias. Dicen que no hay mal que dure 100 años. La pesada herencia del macrismo parece que sí", ironizó.

Si continuamos con este juego que va de derecha a izquierda nos encontramos con el liberal José Luis Espert, economista que protesta en general por el gradualismo adoptado por el gobierno de Cambiemos y volvió a criticar una medida como la de hoy. También en las redes sociales escribió: "a qué plazo y tasa nos prestan, me tiene sin cuidado. Me preocupa que no aprendamos que en 60 años tuvimos 56 de déficit con cuatro crisis homéricas".

El economista kirchnerista Agustín D'Atellis se mostró horrorizado con la medida y dijo: "Es una locura. Dijeron que cerraban con los holdouts y que la idea era bajar las tasas y ahora fijan a 100 años una tasa del orden de 8,5 %". Mientras que el asesor del renovador Sergio Massa, Guillermo Nielsen, ex secretario de finanzas durante la gestión de Roberto Lavagna en la presidencia de Néstor Kirchner, expresó en diálogo con periodistas de la agencia DyN. "Es una desubicación importante  ya que, cuando se emite deuda, lo que siempre hay que tener presente es qué cosa estás haciendo en política económica. Así, si te lo valoran, la tasa va bajando. Cuándo estuvimos con el ex ministro de Economía, Roberto Lavagna, al principio nos mataban con la tasa pero después la fuimos bajando. Da la impresión como que han tirado la toalla en un aspecto muy importante: no van a poder bajar la tasa en el futuro. Es lo que están diciendo con la acción que han tomado", cerró Nielsen.

Ariel Ferrari, de la Fundación Economía y Sociedad (FUNDECOS) realizó una comparación con los títulos de otros países que existen en el mercado y que son a 100 años y distinguió: "no tienen el historial crediticio de la Argentina. En el exterior existen bonos similares pero en economías serias y en países desarrollados. El principal problema es que es un título a muy largo plazo donde el que toma los dólares no los va a pagar". Y sostuvo: "financieramente es una herramienta válida pero no me gusta mucho desde una mirada ética. Si la colocación va a ser para financiar gasto corriente no es muy ético".

El economista Agustín Monteverde, en declaraciones radiales, también se preocupó por el largo plazo del bono. Consideró que "la tasa parece baja en relación a nuestro pasado reciente pero es extraordinariamente alta. Estamos endeudándonos a una tasa alta y a 100 años", criticó. Una mirada mas técnica y contemplativa la otorgó Miguel Kiguel, quien en diálogo con DyN, sostuvo "la colocación fue parte de un objetivo de avanzar en el programa financiero. Como el dólar se movió menos de lo proyectado, se necesitaban más fondos y la operación de hoy fue una forma de cerrarlo", explicó.