13 de Septiembre de 2016 - 17:40

Melconián: "No hay que elevar las tasas de interés, hay que bajar la inflación"

El presidente del Banco Nación, Carlos Melconián, afirmó a Minuto de Cierre que la inflación "está empezando a bajar, no se bajó". En este sentido, consideró que  "deberán consolidarse las expectativas de precios" y la "estabilidad institucional" para mejorar las tasas de los bancos por los ahorros y la confianza en la economía.

Por Antonio D' Eramo 

Reflexivo en sus respuestas y rodeado por sus pares del sector financiero de la banca pública y privada, Carlos Melconián, referente económico de Cambiemos, de fluido diálogo con Mauricio Macri, pero de poco contacto con la prensa desde que asumió al frente del Banco Nación, se detuvo a dialogar con Minuto de Cierre.

 

En el panel que integró junto a Juan Curuchet del Banco Provincia; Daniel Llambías, de ADEBA; y Claudio Cesario, de ABA, en el Foro de Inversión y Negocios de Argentina, el presidente del banco más importante de Argentina  se refirió al rol de las entidades locales en el financiamiento a largo plazo y señaló las dificultades para recompensar a los ahorristas.

 

A.D: ¿Cómo ve la inevitable dificultad del fomento al ahorro y la posibilidad de inversión de la banca que provoca el bajo rendimiento que otorgan los bancos a los plazos fijos?

 

C.M: En el mundo estable, la tasa de remuneración al ahorrista es levemente positiva. Pero cuando la inflación es más del 30% anual, como ha heredado este gobierno, contrarrestar al 30% de inflación con tasas de interés al 35 % de rendimiento, lleva a un modelo brasileño de acumulación de deuda, que al final termina mal. Entonces, ahí, no hay que contestarle a la inflación con más tasa de interés, hay que contestarle bajando la inflación. Ahora, todos los países normales del mundo remuneran a sus ahorristas con una tenue tasa de interés positiva. Pero estamos hablando de países que tienen 4 % de inflación anual y la tasa de remuneración al ahorrista es 3,9% o 4,1% y la tasa activa tiene 4,5%, o sea 0,5 % de premio.

 

A.D: ¿El Banco Central no está pidiendo más remuneración para el ahorrista?

 

C.M: No se qué es lo que pide el Banco Central, lo único que he dicho es que el pivot en el cual se mueve todo el plan es la tasa de inflación. Yo empecé diciendo aquí que el tema central es la estabilidad de la inflación y cuando cerramos el panel, todos coincidimos en que el problema es consolidar la estabilidad, luchar contra la inflación y recuperar la confianza. El tema número uno de la remonetización de la economía es la estabilidad institucional y la económica.

 

A. D: Sin embargo, la inflación parece estar cediendo y las tasas de retorno de los créditos no lo han hecho.

 

C.M: Pero eso pasa porque la inflación está empezando a bajar, no se bajó la inflación. Ahora, deberán consolidarse las expectativas a la baja de la inflación de precios. Esto es como cuando los chicos comienzan a leer: yo tengo dos nietas y me doy cuenta que la más chiquita cada vez lee un poco más, ahora cuando lee las primeras palabras, mamá o papá, yo no puedo decir que aprendió a leer.

 

A.D: ¿Cómo pueden llegar las inversiones con este contexto?

 

C.M: No hay una fecha, pero en la medida en que todos los días estemos un poco mejor, en la medida que se vaya consolidando la estabilidad, las inversiones vienen ineludiblemente. Lo mismo que la remonetización, hay una correlación ineludible con la estabilidad. El conjunto de problemas que hemos heredado, con nueve años de tasa de inflación de dígitos altos y tasas en consonancia, el problema viene desde ahí y estaremos mejorando paulatinamente.

 

A.D: ¿Cómo esta el Banco Nación y qué herencia recibió?

 

C.M: Tenemos récord de créditos hipotecarios, tenemos solicitudes por 32.000 pedidos y tenemos entregados 2.500 pedidos. Estamos en un promedio de $850.000  por persona y damos hasta el 80% de $2.800.000 y el promedio de pedidos los tenemos concentrado en esos $ 850.000. Creo que el mecanismo de créditos que está ofreciendo el Banco Nación es correcto. Acerca de la herencia recibida, yo recibí un banco abandonado, en el sentido de que perdía, semana tras semana y mes tras mes, mercados. Y este es un banco del Estado, que pertenece a todos los argentinos y el progresismo, haciéndole perder negocios y mercados, dejaba más volumen de negocios en otras instituciones privadas, que le arrebataron el mercado. Entonces, tenemos una política muy agresiva, para retomar de nuevo el porcentaje que el banco supo tener en el mercado financiero.

 

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