Ordenan intervención de fuerzas armadas y evacuación de ministerios
Michel Temer ordenó por decreto la intervención del Ejército, durante una semana, para reprimir las manifestaciones y garantizar la seguridad en Brasilia. La medida fue tomada tras las multitudinarias protestas que se produjeron en el Distrito Federal, reclamando su renuncia, que generaron daños y enfrentamientos con la Policía del Estado.
El presidente de Brasil decretó la intervención de las tropas federales para garantizar la seguridad de Brasilia, capital y sede del gobierno federal del país. Además se ordenó la evacuación de los ministerios, que están siendo escoltados por las fuerzas de seguridad.
Según consigna el diario O´Globo, Michel Temer activó la "Ley de Garantía y Orden" (GLO) para que las fuerzas armadas intervengan y garanticen la seguridad de Brasilia durante una semana, hasta el 31 de mayo. El decreto fue publicado en la edición especial de la Gaceta Oficial.
La medida de Temer fue tomada como respuesta a las protestas que se llevaron a cabo en la Explanada de los Ministerios, donde funcionan las distintas sedes de los tres poderes del Estado, para exigir su renuncia. Los manifestantes dejaron varios edificios públicos dañados y mantuvieron enfrentamientos con la Policía Federal. Las manifestaciones se extienden al Congreso Nacional. Según el medio local, unos 35.000 brasileros participaron de la convocatoria.
Según explica O´Globo, la "Ley de Garantía y Orden" es invocada cuando hay "agotamiento de las fuerzas tradicionales de la seguridad pública, en los casos graves de conducta desordenada." La disposición constitucional, que es responsabilidad exclusiva del presidente, establece que los militares pueden actuar provisionalmente con poder de policía.
El gobierno de Temer aclaró que el uso de esa ley no es una intervención militar, como la que se produjo durante la dictadura. En este sentido, recordó que se utilizó durante los Juegos Olímpicos y la Copa Mundial para garantizar la seguridad de las personas en el Distrito Federal.
El ministro de Defensa, Raul Jungmann, condenó el acto convocado en Brasilia para reclamar la renuncia del presidente, en un pronunciamiento por la televisión oficial. El funcionario transmitió el mensaje de Temer, que calificó la protesta de "inaceptable" e "incontrolada".
"El presidente está dispuesto a insistir en que es inaceptable a la revuelta, es inaceptable la falta de control y que no permitirá que actos como éste turben un proceso que se desarrolla en forma democrática y con respeto a las instituciones", apuntó el ministro de Defensa, que anunció la medida de Temer.
"Se vino abajo la violencia, el vandalismo, la falta de respeto, la agresión a la propiedad pública, la amenaza a la gente, muchos servidores que están aterrorizados y que estamos en este momento asegurar su evacuación", indicó Jungamann.
La decisión fue tomada por el presidente, en una reunión con los ministros de Jungmann, Eliseu Padilha (Casa Civil), Moreira Franco (secretario general), Antonio Imbassahy (Secretaría de Gobierno) y Sérgio Etchegoyen (Oficina de Seguridad institucional).
