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Por Antonio D'Eramo

Las críticas del gobernador pampeano, Carlos Verna, y de otros dirigentes justicialistas acerca de la actuación del Ministerio de Ambiente que conduce el rabino Sergio Bergman aún resuenan en las oficinas del Ministerio de Interior y en la secretaría de protección civil. Bergman se defiende y da razones sustentadas en la ley y contraataca. En muchas estados provinciales fallan la prevención y la metodología para sofocar el fuego. 

¿Cuáles son las zonas afectadas por los incendios?

Tenemos focos activos en La Pampa y en Mendoza. Estamos recibiendo informes periódicos del Sistema Meteorológico Nacional asociado al sistema nacional del fuego. Lo importante es que se ha articulado un comité de crisis. En la secretaría de protección civil, dependiente del Ministerio de Seguridad, desde donde se analiza la situación, se monitorea la situación nacional y se actúa. Todo supervisado por el Jefe de Gabinete de Ministros. Pero, como le decía, estamos en alerta. Hay focos activos en La Pampa en Mendoza, y estamos siguiendo muy de cerca lo que sucede en Chile, lamentando víctimas fatales, expresando nuestra solidaridad con el pueblo chileno porque de alguna manera compartimos, la cordillera y este fenómeno regional que, evidentemente, nos tiene que mantener activos y preocupados porque tenemos por delante un largo verano.

¿Este desastre producido en Chile puede trasladarse a nuestro país?

No necesariamente, porque la Cordillera funciona como barrera natural. Pero estamos hablando de una misma tipología, o sea, estamos hablando de incendios forestales. Los que tuvimos este año, a diferencia del anterior, los tuvimos en la reserva de Valeria del Mar. Luego pasamos a otro tipo de incendios que se produjeron en la llanura abierta de lo que es monte achaparrado, zona de La Pampa; sur de la Provincia de Buenos Aires; Río Negro y por ahora algunos incendios forestales muy puntuales. Pero estamos trabajando de manera muy atenta gracias a los alertas del Servicio Meteorológico que mencionaba antes y estamos monitoreando no sólo incendios sino también inundaciones. Si bien toda la situación de la semana pasada esta controlada en términos del nivel del agua, la idea es no desatender a la población, brindando asistencia estatal y sumando la solidaridad de la gente que se ha movilizado ante las pérdidas.

Hubo criticas de gobernadores afectados por estos fenómenos en el sentido que la ayuda no llegó rápido, que faltan realizar licitaciones y que no se realizan por la burocracia de la Nación...

Desmentimos lo primero, en relación a los comentarios que no se cumplió con lo pautado. Además, se desconoce la ley nacional de manejo de fuego y ésta establece que la competencia de la Nación es coordinar, asistir y cumplimentar la incumbencia primaria e inmediata de la jurisdicción provincial. Por lo tanto, las jurisdicciones locales tienen la responsabilidad de prevención, que no se hizo en todos los casos, y luego, de sofocar el fuego y, sólo cuando se requiere la participación de la Nación, o cuando se alcanza la fase tres de fuego y donde los desbordes hacen inmanejable la situación, actuamos Pero, no tenemos ninguna constancia de ninguna jurisdicción que haya pedido participación de la Nación y que no hubiéramos participado en tiempo y forma. Por lo tanto, esta situación nos deja a nosotros tranquilos.

También se critica, muchas veces de manera pública, su idoneidad para el cargo...

Con respecto al tema de la idoneidad yo quiero poner de manifiesto que estoy tranquilo, que estamos haciendo las cosas como corresponde, y fundamentalmente, por la actuación y el mérito que tienen nuestros brigadistas. O sea, a mi particularmente, si me quieren criticar podemos tener una discusión pero desmerecer el trabajo profesional de nuestros brigadistas y nuestro personal que estuvo en tiempo y forma arriesgando sus vidas, representa una falta de respeto para ellos y la gente que esta trabajando horas y días. Porque no hay día que no haya un incidente. Detrás de cada fuego hay personal que está trabajando para contenerlo asi que, si quieren criticarme a mi háganlo, pero no desmerezcan el trabajo profesional de nuestra gente.