26 de Marzo de 2019 - 10:55

Ruta del Dinero K: Daniel Muñoz lavó dinero con el contador y un aliado de Bertone

La confesión de Víctor Manzanares, ex contador de la familia Kirchner, ya aceptado como arrepentido, pegó en el corazón del poder político de Tierra del Fuego. Señaló a Julio Del Val, contador y amigo de la gobernadora Rosana Bertone; y a Alejandro Vernet, esposo de una legisladora de la Unión Cívica Radical, Liliana Martínez Allende, que vota todos los proyectos de ley del oficialismo provincial.

La famosa “Causa de los Cuadernos” es una caja de sorpresas. Se habló y especuló con gobernadores e intendentes que desfilarían por Comodoro Py. Sin embargo, el primer titular de Poder Ejecutivo provincial comprometido resultó Rosana Bertone, la gobernadora de Tierra del Fuego. A pesar de sus lazos con Néstor Kirchner, Lázaro Báez (le gestionó negocios en su provincia mientras era diputada y senadora) y Cristóbal López (compró en u$s 10 millones un casino que era suyo), no se apuntó a ella directamente. Pero sí a Julio Del Val, nada más y nada menos que su contador, que además fue vocal del Tribunal de Cuentas de la provincia, cargo al cual llegó por pedido de Bertone, y al que renunció el diciembre de 2017 por un supuesto escándalo de $ 26 millones gastados en cuentas secretas del poder ejecutivo que comanda su amiga.

En la declaración de Manzanares, que la semana pasada fue aceptado como arrepentido por el fiscal Carlos Stornelli y el juez Claudio Bonadio, también se apuntó contra Alejandro Vernet, esposo de la legisladora provincial del radicalismo Liliana Martínez Allende, parte de la “mayoría automática” que le vota a Bertone todas las leyes que pide, hasta las más polémicas.

La confesión de Manzanares sobre el lavado de dinero en Tierra del Fuego brinda detalles muy claros: nombres, sociedades, montos y fechas. “En el 2009”, Muñoz “tenía intenciones de desarrollar una usina para lavar dinero aprovechando la legislación de Tierra del Fuego”, lo que llevó a “una negociación con el señor (Alejandro) Vernet”, confiesa Manzanares. Y agrega: “la propuesta de Vernet era venderme junto con su socio, Malemasi, las cuotas sociales de una SRL que explotaba un restaurante en pleno centro de la ciudad de Ushuaia de nombre Azul”. 

El ex contador de la familia Kirchner también detalla cómo se llevó adelante el lavado de dinero. Se pagaron leyes sociales e impuestos brutos, “más un 5% del monto de la operación como costo del lavado”, y el monto total fue de “entre 5 y 7 millones de pesos durante el período en el que se desarrollaron estas operaciones. Recuerdo haber hecho una transferencia en el año 2009 por 135.000 pesos a la cuenta del señor Vernet en concepto de compra de cuotas sociales”.

La plata era de Muñoz, y Del Val el contador involucrado

En su declaración, Manzanares afirma que “todo este dinero era de Muñoz”. También brinda detalles de cómo invirtió para lavar dinero en la farmacia Llaneza y Asociados, y cómo esta alquilaba en San Martín 1335, la avenida más importante de Ushuaia, una propiedad que “pertenecía al señor Vernet”. Las “inversiones” de Daniel Muñoz en el Grupo Llaneza, del cual el esposo de la legisladora Martínez Allende era una especie de representante o intermediario, totalizaron u$s 8,5 millones según la confesión del último arrepentido aceptado como tal en la Causa Cuadernos.

Por otra parte, en la sociedad que explotaba el restaurante Azul, que fue la primera iniciativa para lavar dinero de Muñoz en Tierra del Fuego, “el contador era Julio Del Val”, declaró Manzanares. Del Val es el corazón del sistema de poder que armó Rosana Bertone en Tierra del Fuego.

La gobernadora ubicó a Del Val en el estratégico Tribunal de Cuentas de la provincia, donde los cargos son a perpetuidad; sólo cesan los miembros del mismo por renuncia o juicio político. En diciembre de 2017, tras un escándalo de supuestas cuentas secretas, donde la justicia fueguina no avanzó, Del Val renunció aclarando que mantenía su buena relación con la gobernadora.

En la actualidad, todos lo señalan como lo que siempre fue: el contador de Rosana Bertone. El mismo que guarda los secretos sobre por qué se pagaron más de u$s 10,3 millones en comisiones por la deuda de u$s 200 millones tomada en Nueva York; y también el contador que conoce el estado real de las cuentas personales de la gobernadora. Una vez que Bertone deje el poder, pues las encuestas la dan perdiendo el 16 de junio frente a Gustavo Melella (intendente de Río Grande), los opositores se ilusionan con Del Val transformado en el “Manzanares” (arrepentido) de Bertone. Quizás sea mucho pedir, pero el tiempo dirá . 

 

 

 

 

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