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Personal de la Policía Bonaerense encontró un cadáver enterrado en cercanías al denominado Camino Negro, que une las localidades de Villa Elisa, partido de La Plata y Punta Lara, Ensenada.

El hallazgo se produjo en el marco de los rastrillajes por la búsqueda de la odontóloga Gisella Solís Calle, de 47 años, que había desaparecido el 16 de enero y comenzó a ser buscada tras la denuncia de desaparición realizada por su familia.

El cuerpo encontrado se encontraba cerca de un pequeño arroyo, a pocos metros de la bajada Villa Elisa de la Autopista Buenos Aires-La Plata, en el inicio de Camino Negro.

Las últimas pericias buscaban concentrarse en determinar los movimientos posteriores a la desaparición de la profesional, concretados por quien era su novio, Abel Casimiro Campos, el ex combatiente de Malvinas de 56 años que se mató de un disparo el 20 de enero pasado.

Bajo las directivas de la fiscal platense Ana Medina, los investigadores se concentraban en imágenes de cámaras privadas, municipales y de autopistas para tratar de determinar los movimientos de Campos, y de esa manera dirigir nuevos rastrillajes

En las últimas horas trascendió que las imágenes ubican a Campos en 1 y 46, una zona cercana a la que una mujer encontró el celular Samsung J6 dorado de Solís.

Se sabia que el hombre se acercó a la zona de la Terminal de Ómnibus para comprar un pasaje a Lobería, donde reside su esposa e hijo adolescente.

Ya se habían hecho rastrillajes con decenas de policías e importantes recursos, como perros entrenados, caballería y botes, en zonas de Berisso, Ensenada, Villa Elisa, Guernica y Olmos, cerca de la rotonda de Etcheverry, sin que se produjeran resultados positivos.

"Les tengo que comunicar la mala noticia para mi familia de que encontramos a Gisella", dijo la hermana de la profesional asesinada. "Yo la quería encontrar viva, esa era mi ilusión. Pero la encontré muerta. Este desgraciado mató a mi hermana, ha desmembrado a mi familia"

"En el Facebook puse ayer 'Necesito ayuda divina para encontrarla', la recibí pero la encontré muerta", se lamentó Mariela.

Tras agradecer el trabajo realizado por el personal policial y la fiscal Ana Medina, pasó a hacerle una solicitud a los medios: "Necesito que protejan a mis papás que son grandes. Ellos no saben la noticia, estamos yendo a comunicársela. Necesito pedirles que por favor no me acompañen más. Esto es un duelo y un proceso que tengo que hacer con mis papás porque no quiero que ellos se mueran".