25 de Agosto de 2018 - 07:24

El asesor aduanero pasó de estrella a acusado de crear una Aduana paralela

A Felipe Viramonte Noguer, el asesor del titular de la Aduana, Diego Dávila, le armaron una comisión investigadora. Buscan confirmar si frena expedientes y multas millonarias, tal como denunció Minuto de Cierre. Sus vínculos con el abogado Juan Patricio Cotter.

Los ascensos demasiado rápidos suelen provocar caídas igualmente veloces. Sobre todo, cuando la picardía del actor en cuestión no sólo deja heridos y marcas, sino también cuando es tanto mayor que la solvencia profesional. A nivel de la alta política, uno de los grandes ejemplos es Amado Boudou. En menos de un lustro fue empleado y luego titular de la Anses, ministro de Economía, vicepresidente promisorio y más tarde condenado socialmente. Hoy está preso.

Con las grandes distancias del caso, y sin augurar procesos judiciales contra él, algo parecido le ocurrió al “millenial” Felipe Viramonte Noguer en la Aduana. Arrancó con la venia de Diego Dávila, cargo de asesor con un sueldo apenas aceptable (alrededor de 50.000 pesos), y llevando facturas para que los aduaneros de carrera acompañaran sus mates. En poco tiempo manejaba a diestra y siniestra un área clave, se compró un auto valuado en $ 450.000, y hasta soñó con una subsecretaría.

En la cúspide de su influencia, era común verlo almorzar en "Estilo Campo" con el despachante de Aduana de Finning, una de las empresas más favorecidas por la "llegada" de Viramonte. Ese despachante, Ricardo El Gáname, junto a CMC Campbell, eran los favoritos del joven. La figura del despachante es clave en todo lo que significa el manejo aduanero. Del grupo selecto de Viramonte (además de El Gáname y Campbell) también formaba parte el aduanero Horacio Alasia, un encumbrado en la era de Juan José Gómez Centurión.  

Tras la nota anterior de Minuto de Cierre, advirtiendo sobre las maniobras junto a un estudio jurídico en el cual desempeñó casi toda su vida laboral (http://www.minutodecierre.com/nota/2018-8-16-14-44-0-aduana-paralela-culpan-a-un-asesor-de-davila-de-frenar-mas-de-200-expedientes-con-multas-millonarias), el titular de la Aduana dispuso el armado de una comisión investigadora sobre los expedientes que determinaron multas millonarias que nunca fueron pagadas.  

Estas multas vienen de la época del kirchnerismo, cuando Guillermo Moreno obligaba a las empresas a exportar un dólar por cada billete verde destinado a los bienes de importación. De aquella época, más de un centenar de empresas evadió impuestos de la siguiente manera: declaraban lo exportado en la posición arancelaria 2309 (alimento balanceado para animales), que pagaba un 5% de retenciones; cuando en realidad lo que enviaban al exterior eran pellets de soja, con la posición arancelaria 2304 y 30% de retenciones. 

Los dos casos con mayor perjuicio para el Estado son de las emrpesas New San y Finning. New San es la productora de las marcas de electrónicos y electrodomésticos Noblex, New San, Philco y SIAM, entre otras. En esta maniobra de declarar alimento balanceado por soja, New San habría facturado u$s 110 millones, con un perjuicio para el Estado Nacional por u$s 24 millones. En esta línea, la segunda compañía en importancia es Finning, distribuidora de la marca Caterpillar, de gran peso en maquinaria vial y agrícola. En el caso de Finning, la facturación habría sido de u$s 80 millones y el perjuicio para el Estado Nacional de u$s 17 millones. 

 

Los dos lados del mostrador

 

Para “atajar” o “cajonear estos expedientes, el rol de Viramonte sería clave. En la instancia administrativa, las empresas apelan para no pagar, y se demora la respuesta a tal apelación.

Si el tema llega hasta lo judicial, incluyendo la instancia del Tribunal Fiscal Federal, muchas de las empresas son representadas por el estudio Petersen Cotter Moine, donde Viramonte Noguer trabajó entre noviembre de 2012 y agosto de 2016, justo antes de entrar a la Aduana. 

Antes se había desempeñado en “Petersen Jorge Emilio, Cotter Juan Patricio y otros” (septiembre de 2007 a octubre de 2012) y en la Municipalidad de San Isidro.

Cuando los aduaneros empezaron a vislumbrar la conexión de Viramonte con su empleador desde casi la adolescencia (Juan Patricio Cotter), y que este mismo representaba a empresas cuestionadas por la Aduana; más la aparición del joven sanisidrense a bordo de un Volkswagen Golf TSI modelo 2015 (con un sueldo de $ 50.000), cantaron “¡Bingo!”

Dávila, que está dejando hasta la salud para ordenar la Aduana (el Gobierno ya tendría al sucesor), analizó los datos y ordenó formar una comisión específica para analizar los expedientes por exportaciones declaradas con retención del 5%, pero que deberían haber tributado 30%. Luego de ello, la estrella de Viramonte quedó más en declinación que nunca. Aunque por ahora sigue formando parte de la Aduana. 

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