06 de Junio de 2017 - 19:51

Preocupación mundial por la resistencia de las bacterias a los antibióticos

En Buenos Aires se realizó un seminario con especialistas de la región y de la Unión Europea, donde se concluyó que el uso abusivo de parte de la población de los antibióticos fortalece la resistencia de vida de las bacterias. Esto produce, en las mayorías de los casos, la muerte del paciente.

Por Antonio D'Eramo

Se ha hecho usual en los últimos tiempos oír en las salas de terapia intensiva o de cuidados graves de los hospitales la frase dicha por médicos "el paciente sufre una infección de un virus intrahospitalario o de una bacteria resistente a todos los antibióticos disponibles". El resultado siempre es el mismo. El deceso del infectado. Y la impotencia de los profesionales de la salud por no poder salvarlos. En particular esto sucede en nuestro país en épocas invernales, de temperaturas cercanas al cero, donde florecen las neumonías en las personas más vulnerables. También existen casos en donde un paciente ingresa por un tema distinto al de una infección y luego de permanecer en el hospital contrae el famoso "virus o bactería intrahospitalario". provocando una tragedia posterior.

Ocurre en todo el mundo inclusive en los países desarrollados. Una de las frases mas catastróficas que ilustran la deblacle de la medicina moderna ante estas bacterias resistentes fue escuchada el lunes 5 en el seminario organizado en nuestra ciudad. El experto Rui Ludovico, consejero para América del Sur de la dirección general de salud y alimentos de la Unión Europea, expreso a una cronista del diario Clarin que "se puede comparar con la lucha por el cambio climático. Si no hacemos nada hoy, para el 2050, las consecuencias serán catastróficas".

Por ello no sorprende la decisión adoptada en el día de hoy por la Organización Mundial de la Salud (OMS) que presentó una nueva división de los antibióticos, en la que diferenció los que deben usarse para infecciones comunes y los destinados para situaciones más graves, incorporando nuevos fármacos contra la hepatitis C, el VIH, la tuberculosis y el cáncer, en la mayor revisión histórica del Listado de Medicamentos Esenciales creado hace 40 años. 

Esta nueva lista añadió 30 medicamentos para adultos, otros 25 para niños y especifica nuevos usos para nueve productos que ya estaban en la nómina, lo que eleva el total a 433 fármacos. "Muchos países utilizan la Lista de Medicamentos Esenciales de la OMS (LME) para aumentar el acceso a los medicamentos y orientar las decisiones sobre los productos que deben estar disponibles para sus poblaciones", explicó el organismo.

En esa lista, la OMS agrupó a antibióticos empleados para tratar 21 de las infecciones generales más comunes en tres categorías -acceso, observación y reserva- y emitió recomendaciones sobre cuándo debería usarse cada una. "El cambio tiene como objetivo asegurar que los antibióticos estén disponibles cuando sea necesario, y que los antibióticos adecuados se prescriban para las infecciones adecuadas", indicaron los especialista a través de un comunicado. Además los expertos de la organización recomiendan que los antibióticos en el grupo "acceso" estén disponibles "en todo momento para el tratamiento de un amplio abanico de infecciones comunes, como por ejemplo la amoxicilina, utilizado para tratar infecciones como neumonías".

El grupo "observación" incluye antibióticos que se recomiendan como tratamientos de primera o segunda elección para una serie de infecciones pequeñas como la ciprofloxacina, para atacar la cistitis e infecciones del aparato respiratorio superior (como sinusitis), "cuya utilización debería ser reducida "dramáticamente" para evitar un mayor desarrollo de la resistencia a antibióticos".

El tercer grupo, "reserva", incluye antibióticos como la colistina y algunas cefalosporinas que deben ser considerados opciones de "último recurso" y usarse "solo en las circunstancias más graves cuando todas las alternativas han fracasado, como por infecciones posiblemente mortales debido a bacterias multirresistentes". El documento actualizado de medicamentos esenciales incluye además fármacos nuevos, como el dasatinib y nilotinib, que son tratamientos orales de la leucemia mieloide crónica que se había vuelto resistente al tratamiento estándar. También incluyó sofosbuvir con velpatasvir como la primera terapia de combinación para tratar los seis tipos de hepatitis C (en efecto la OMS está actualmente actualizando sus recomendaciones de tratamiento para esta enfermedad).

En referencia al VIH, incorporó al dolutegravir como droga nueva para tratamientos, y para la profilaxis previa a la exposición (PrEP) añadió el tenofovir solo, o en combinación con emtricitabina o lamivudina, que si bien son drogas ya utilizadas no estaban indicadas para la prevención.

LA SOLUCIÓN PARA LA CRISIS

La posible solución para terminar con esta resistencia a los fármacos vendrá precisamente de la industria farmaceutica y de los avances en biotecnología. La revista especializada Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), un grupo de expertos de la organización biomédica The Scripps Research Institute (TSRI), en Florida, logró otorgar "súper poderes"a la vancomicina, un antibiótico descubierto en la década de los 50 y contra el que los patógenos no fueron capaces de desarrollar resistencia hasta después de 30 años. De esa manera lograron un antibiótico mucho mas potente. Los médicos podrán usar esta forma modificada de vancomicina sin temor a que surja resistencia, consideró en el estudio Dale Boger, director de la investigación y copresidente del Departamento de Química de The Scripps Research Institute.

Comentarios